Después de conocer la famosa isla Margarita, totalmente recomendable junto con el parque nacional Mochima en el oriente de Venezuela. Nos fuimos a la capital, Caracas.
«Constante en Venezuela. Miedo, tengo Miedo, mucho miedo de …»
¿Pánico? Terror es poco. Bueno Juan estaba tranquilo. Yo estaba estresadísima, asustada, angustiada y todo lo que pudiera acabar en -ada y me generara más miedo y estrés.
Si aún te sigues preguntando por qué tenía tanto miedo… Ajá, ok, dicen que Caracas es la ciudad con el índice más alto de robos, delincuencia, secuestros… del continente Sudamericano… Que tal como está la situación del país actualmente no ameritaba pasar a conocerla. Menos si íbamos a arriesgar nuestras vidas yendo para allá.
[piopialo vcboxed=»1″]
A veces digo que el miedo con moderación te mantiene alerta.
Vamos a hablar de
[/piopialo]
Cómo llegamos
Para llegar a Caracas por tierra no vas a tener muchos problemas, generalmente las ciudades más o menos grandes del país tienen conexión directa hasta la capital. Así que por eso no te deberías preocupar mucho.
Nosotros desde Puerto la Cruz, nos fuimos en un bus que tardó unas 6 horas más o menos, fuimos de día y sin ningún problema llegamos a la gran capital.
Primeras impresiones
Bajamos del bus, esto ya no era ni la Gran Sabana, ni Mochima, esto era CARACAS, y en mayúsucla. Lo escribo porque si nos hubieras visto en ese momento y nuestro estrés, lo comprenderías mejor.
Agarramos las mochilas, todo en orden, y salimos de la terminal. Ahí nos esperaría un amigo, Juan Carlos, esposo de Alejandra que nos acompañarían a recorrer Caracas y a pasar desapercibidos como buenos caraqueños.
Lo vemos, nos saludamos y salimos a la calle. Ok, sin prisa pero sin pausa, vamos con las mochilas, es de día, no estamos lejos de la casa… Oye, pero si aquí, no pasa nada. ¡Sorpresa!
«No es que en Caracas no pase nada, sólo hay que saber cómo moverse para que no pase.»
La ciudad, al menos por donde habíamos llegado, era una ciudad tranquila. Las típicas casas de las misiones de Chávez que son multicolores, con grafitis muy bonitos y que le dan color a la ciudad. Aquí además se mezclaba con todo este cuadro, autopistas por arriba, por la izquierda y por la derecha. Así es una capital.
[piopialo vcboxed=»1″]
Después me di cuenta que, el miedo exagerado te delata y no te deja vivir.
[/piopialo]
Qué hay que visitar en Caracas
Nos relajamos, y empezamos a fluir como el resto de la gente que vive en la capital. Nos quedaríamos unos 4 – 5 días para recorrer la ciudad y lo que uno no se puede perder es:
Ir al paseo de Los Próceres
Contemplar esa avenida con esculturas y parques hermosos homenaje a los nobles que lucharon por la independencia de Venezuela.
Totalmente tranquilo ya que está vigilado todo el día, pero mejor ir por la mañana para poder tomar buenas fotos. Pasear y contemplar las instalaciones de la universidad central, considerada por la UNESCO patrimonio de la humanidad.
Museos y mercados imperdibles
Ir a la Casa Natal y al Museo Bolívar, y cómo no, a nosotros siempre nos encanta ir a los mercados. Aquí fuimos al mercado municipal de Chacao.
RELAJARSE
Tomarse un cafe o relajarse en la plaza de Altamira (zona en la que cualqueira puede sacar su smarthphone y no pasa nada, nada). Ir al Teatro Maria Carreño, y tomarse algo mientras la gente baila salsa un viernes por la noche. Animarse a dar unos bailoteos con un venezolano no estaría de más.
Quién nos iba a decir a nosotros que íbamos a estar de noche en Caracas y encima «rumbeando»
EL CENTRO DE CARACAS
Pasear por el centro. Ojo, ir a la casa donde se supone que está el presidente, Miraflores, puedes, pero está determinadamente prohibido sacar fotos en toda esa cuadra. Si no, vas preso, preguntamos a un guardia simpático y nos dijo eso.
«Pilas por el centro»
NATURALEZA
Hay que tener precaución en los lugares más transitados de las ciudades grandes. Sin paranoia estar atento y no ser un blanco fácil. Subir al Ávila. Puedes subir caminando o en el teleférico.
El teleférico el lunes hace mantenimiento y no abre. Las vistas de la ciudad es hermosa, y se llega a ver el mar desde ahí. Por otro lado también es interesante ver si hay alguna muestra cultural de fotos o cine, siempre hay alguna presentación, y nos parece muy genial siempre movernos por esos ambientes y ver el movimiento cultural de la ciudad.
Nuestra experiencia
Yo la más miedosa del mundo mundial, me sentí tranquila en esta ciudad gracias a la compañía de esta pareja caraqueña que nos ayudó en nuestra estadía ahí. En casos así nosotros preferimos contactar con alguien local para que nos diga por dónde ir y por donde no. Ellos fueron nuestro contacto, y nos ayudaron mucho.

Recorrimos la ciudad y pudimos conocer incluso el barrio de Brisas Propatria, ya que hay una fundación donde sacan a los chicos de la calle y los incentivan a jugar al fútbol. Una excelente iniciativa, que está en toda Venezuela. Eso demuestra que sigue habiendo gente buena en el mundo, dispuesta a ayudar a cambiarlo, para bien.
El Barrio de Caracas
En Brisas Propatria nos trataron excelentemente, sí fuimos con nuestros amigos y conocíamos a gente que vivía allí, no sabemos qué tan o no peligroso puede ser si uno va sólo por ahí, pero nosotros no lo aconsejamos en este momento de la actualidad.
Cada familia que visitamos nos contaban cómo era su vida con el fútbol. Nos invitaban a una tacita de café (el café es muy costoso en Venezuela actualmente, pero aún así nos lo brindaban). Nos hablaron de cómo era el Barrio (lo que sería una favela, o las chabolas o villas en otros países), antes y cómo es ahora con este proyecto.
«Este proyecto ha unido a la gente del barrio, ayuda a sacar la droga del barrio y mentaliza a adultos y niños acerca del compañerismo».
En otras casa, nos invitaron a cervezas, no terminábamos una y ya teníamos en la mano otra polar light típica del interior del país.Nos sentimos como en casa, y nos trataron demasiado bien.
Agradecer a cada una de esas familias que nos sonrieron y nos invitaron a pasar a su casa y a explicarnos sus historias de vida.
Las vistas desde los barrios son las mejores de la ciudad.
Junquito
Más tarde en el Junquito, donde se está construyendo un complejo para los jóvenes del barrio para practicar fútbol, nos reunimos con el fundador de está iniciativa tan genial. Él es español, nos contó mil aventuras, pero todas se podrían resumir en estas frases que nos marcaron y que ahora llevamos muy presente:
«Yo me fui de España hace más de 40 años, y me fui de una España en blanco y negro, no sabía qué era un helado, nosotros comíamos lentejas incluso con gusanos porque no había más que comer. Llegué a Venezuela y todo era de colores, había helados, coches nuevos… Era pasar de ver las cosas en tonos grises a verlo en colores. Venezuela me acogió, y ahora en momentos difíciles yo me podría haber vuelto a España, pero no puedo dar la espalda a este país que me vio crecer, que me enseñó tanto y que me dio oportunidades donde en casa no las tenía. Por eso no me voy, no me iré y me quedaré aquí luchando por ellos, para que tenga esa oportunidad también»
Excelente lección nos dio ese hombre. Muy agradecidos de haber podido compartir con él ese día. Pero ya nos teníamos que ir…
Chau Caracas
En fin, ya vimos todo lo que pudimos, y nos tocaba despedirnos como siempre. Eso sí, no sin antes descubrir los golfeados con queso, de comernos una buena diabla en la calle del hambre (gigante, pero gigante de verdad). Otra cosa imperdible que se debe hacer en la ciudad.
«Chau Caracas, eres hermosa, cultural y multiculural, con tus cerros y tu sol abrasador. La paranoia siempre presente está pero algún día se irá y no volverá.»
Comparte, danos un like, y coméntanos. ¡¡Compartir es vivir gente 😛 !! Soy una pesá, lo sé… pero es que de verdad estas cosas nos ayudan a seguir, y no os puedo contar la ilusión que nos da ver tu comentario aunque sea de un emoticono 😛
Ahora sí como decimos siempre, gracias por leer hasta aquí, aunque sea por una lectura en diagonal, o no… 🙂
Ah y si nos quieres invitar a un café, o simplemente colaborar con nuestro proyecto, lo puedes hacer haciendo una donación del importe que creas, nosotros te lo agradeceremos también muy muy mucho 😛
[piopialo vcboxed=»1″]Lo imposible sólo cuesta un poco más[/piopialo]

Todo lo que tienes que saber para comprar vuelos online sin caer en estafas y perder el tiempo. Ahorra tu dinero en el vuelo y gastatelo en el destino.
100% libre de SPAM
Que genial que hayan podido conocer Caracas pues muy pocos se dan la oportunidad de visitar esos pequeños espacios de valor histórico cultural. Por lo general, los comentarios, algunos ciertos, y cualquier frase de boca en boca echan para atrás a la mayoría de viajeros; sin embargo, afirmaron que con precaución y buenos conocedores de la zona ese miedo se puede superar, saludos.
¡¡Hola Yoser!! Gracias por tu comentario!! Sí, la verdad que por suerte nos decidimos ir, y gracias a Ale y a Juan Carlos que nos acompañaron en esa aventura y nos dieron todos los tips para pasar por buenos caraqueños. Un abrazo 🙂
Hermosa ciudad caracas…..estuve ahi en el año 89 contigo carol, eras pequeña jejej, no te debes acordar.
saluydos viajeros….
Jajajajajaja no, no me acuerdo, pero caracas seguro que era hermosa. Un besotee Alex!!!
Genial, es bueno saber que aun queda gente atrevida que a pesar de ver a nuestro país en las condiciones que se encuentra, se animan a conocerlo. Gracias por expresar estas palabras de mi país. Un abrazo.
Sí, la verdad no estábamos muy seguros de ir o no, pero lo hicimos y fue una gran experiencia! Abrazo enorme!
Amigos me encantaría entrar en contacto con ustedes, iremos próximamente a Venezuela y todos nos meten miedo pero por lo que averiguamos es posible… Ojalá puedan escribirme e intercambiar Wsp. Abrazos
Hola Consuelo!! Venezuela es un país muy lindo, sólo hay que tener las precauciones básicas. Realmente es barato y para el turista no tiene porqué ser inseguro, a qué ciudades quieren ir?
Hola chicos! Llegue aquí por casualidad y llevo ya un rato leyendo las aventuras que han tenido en mi país. La verdad me encanta la impresión que se llevaron y que a pesar del momento en que vinieron igual se encontraron con la gente buena que aun queda en el país. Muchas gracias por hablar tan bien de Venezuela y de las maravillas que tiene cuando a veces nosotros mismoa nos dejamos llevar y no las vemos. Por cierto, el teatro se llama Teresa Carreño*. Sigan disfrutando del mundo, abrazos.
Gracias por tu comentario y por la aclaración del nombre 😉 Muchos nos decían que por ser extranjeros nos tratarían mejor, y es probable que haya sido así, pero nos sentimos muy cómodos a pesar de las dificultades evidentes! También hemos visto el lado menos agradable (corrupción en todos los estratos) pero es la misma triste historia en todo este hermoso continente! Abrazo grande!!!